Carlos Arce Macías
Es conocido en los estudios sobre el tema, que la mayoría de los políticos son capaces de hacer cualquier cosa con tal de posicionarse entre los electores e intentar ganar su elección. Hemos visto de todo. Candidatos lanzándose en paracaídas, vestidos de charro jaripeando, treparse a globos aerostáticos, lucirse con luchadores, etc. Lo que sea necesario, no hay límite dentro de la ambición política. Una vez inoculados por el poder, el torbellino los atrapa y no hay más salida que la depresión por la derrota final y definitiva. A muchos los sacan del medio solo con los pies por delante.

Ahora paso a relatar los recientes sucesos en mi municipio, Guanajuato Capital (que por cierto, ya ni a capital funcional llega): pues bien, el actual alcalde de nombre Alejandro Navarro, conocido nacionalmente por haber escandalizado con su declaración desaprobando que vinieran turistas pobres a esta ciudad, cargando sus tupers con alimentos, ahora se ha conceptualizado como un “influencer” de redes sociales, chacoteando junto con su conyugue en la red de TikTok. Allí pueden ver sus videos, para que juzguen su deplorable actuación.

Igual aparece tratando de hacerse el simpático, desde el balcón de la Presidencia Municipal, que en su casa presumiendo su lujoso refrigerador, o en el monumento del Pípila, intercambiando voces sobrepuestas al video, fingiéndose mujer, o bien recorriendo, pandemia de por medio y sin mascarilla, el centro de la ciudad en una patineta. Le encanta payasear, es lo suyo.
Y podrá hacer lo que le venga en gana en las redes de su preferencia, salvo que los guanajuatenses no estamos satisfechos con su nefasto gobierno, convertido en instrumento para realizar negocios personales y traficar influencias a favor de sus familiares. Para rematar, en plena crisis de COVID, acechados por la muerte y la enfermedad de familiares y amigos, los chistoretes del patético político local resultan más que desafortunados e inoportunos.

Muchos otros munícipes han puesto el rostro adusto ante la epidemia. Entienden que el momento requiere seriedad. Se destacan especialmente varias presidentas municipales, que, bajo cierto rasgo maternal, han realizado esfuerzos serios por paliar los mortales efectos de la pandemia. Lo han hecho muy bien y sus esfuerzos han sido muy bien recibidos y agradecidos por los ciudadanos.
Pero nuestro alcalde prefiere la burla y la chacota. Y tras de ello, ahora que ha sido designado por su partido, el PAN, para buscar la reelección, expone a los demás candidatos azules, entre ellos al actual coordinador de la bancada en la Cámara de Diputados, Juan Carlos Romero Hicks, a perder votos muy valiosos en la capital estatal, por las ocurrencias del ladino alcalde que padecemos.
Y se desparraman las preguntas ante el despropósito: ¿quién es el torpe que maneja el timón del PAN? ¿No toman nota del papelón representado por su actual alcalde y candidato? ¿Cómo pueden sostener su candidatura, frente a una ciudadanía indignada y agraviada por su pésima gestión ante la emergencia? Parece que el PAN se ha propuesto perder Guanajuato. Y surge la sospecha de que Marko Cortés desea quemar en la hoguera electoral la candidatura de Romero Hicks, quién posiblemente le estorbe en su próximo intento de reelección. ¡Inaudito!

TikTok es una red social china creada por la empresa Bytedance. Opera a nivel internacional desde 2017. Microsoft, intentó comprar la compañía, pero las prohibiciones de Trump, para negociar con China lo impidieron. Dicen los que saben, que la nueva plataforma sirve para “posicionar” temas o personajes con los “centennials” (jóvenes nacidos después del año 2000), intentando viralizar sus videos. Pero el problema está “en el como se posiciona” un individuo, como algo divertido por su ingenio y talento o como un simple payasito en renta. ¡Que vergüenza PAN!
