Carlos Arce Macías
En estos días, el candidato de Morena a la alcaldía de León realizó una osada declaración, que dejó a muchos políticos pasmados. Espetó una contundente frase: negarse a presentar sus declaraciones “3 de 3”, porque “no dejaré información al alcance de Carlos Zamarripa, líder de la delincuencia organizada en Guanajuato”. Con ello logra dos efectos profundos: pone contra la pared al oficialismo panista y se hace harakiri. Quedamos ante una inusitada forma de incomodar a toda la fauna política guanajuatense.

Las llamadas “3 de 3”, son una serie de declaraciones obligatorias para los funcionarios públicos, adoptadas por la legislación a consecuencia de una ardua lucha, iniciada por el escándalo de la “Casa Blanca” del corrupto expresidente Enrique Peña Nieto. A partir de 2015 la oposición, Transparencia Mexicana, el Instituto Mexicano para la Competitividad y la academia, se involucraron en una iniciativa que llevó al cambio de diversas leyes, para finalmente establecer el Sistema Nacional Anticorrupción (SNA). Como primer paso anticorrupción, se acordó que los funcionarios deben declarar sus bienes, sus relaciones de intereses familiares y de negocios, y el cumplimiento de obligaciones fiscales; todo bajo el principio de máxima publicidad.
Y resulta que señor Sheffield no las quiere presentar por miedo al Fiscal General del Estado, de quién depende el Fiscal Anticorrupción de Guanajuato. No debería temer. Nuestro Fiscal Anticorrupción no encuentra ni al sol en plena primavera. Guanajuato es, o la entidad más honesta del país, o la más impune en cuestión de corrupción. Toda la clase política se encuentra a salvo de ser mancillada ni con el pétalo de una rosa, en esta zona abajeña. Por cierto ¿alguien conoce a este gris e intrascendente personaje?
Pero lo que consigue el candidato morenista, es algo paradójico: si los candidatos panistas, no solo en León, sino en todo el estado, no presentan sus declaraciones “3 de 3”, inferimos que asumen el mismo recelo que Sheffield, al temer ser objeto de persecución y chantajes por el crimen organizado que supuestamente coordina el ineficiente Fiscal. ¡Vaya cosa!
Y aquí quedará atrapado, y me alegra, un pícaro como el candidato panista de Guanajuato Capital a la alcaldía, que debe de manifestar el monto de su patrimonio, incrementado en mucho, durante su nefasta gestión; así como su relación de interés, que dejará al descubierto los negocios de su esposa y suegro. Si no lo hace, se igualará a Ricardo Sheffield.

Pero en otro flanco, el hecho de que el candidato del presidente no presente su información, durante la campaña electoral, tiene consecuencias graves. La principal es que los votantes pensaran que algo encubre el morenista, por eso su negativa a compartir sus manifestaciones. Porque resulta poco creíble que un funcionario, ubicado en la cima del poder federal, tiemble ante Zamarripa. Huele a pretexto. Y más, si la candidata azul, logra contrastarse, reaccionando rápidamente, y presenta sus declaraciones “3 de 3”. Sería mortífero para ella, no compartir animosamente toda su información requerida. Así, al tener a la principal candidata del PAN, con su “3 de 3” en mano, no hay forma de que los demás candidatos azules se escapen de hacerlo… a no ser que tengan algo muuuuy gordo que ocultar.
Por su parte, la jugada arriesgada de Shefield disgustará a otros postulantes de su mismo partido. Si presentan sus manifestaciones, contravienen y descalifican al aspirante a alcalde para León, al interpretarse que ellos sí confían en el Fiscal, dejando solo a su colega leonés. Si no lo hacen, la incertidumbre sobre la integridad pública de muchos candidatos de Morena se fortalecerá. Estarían apostando por el silencio, la obscuridad y la discreción, que permite la corrupción. Negarles el voto debería ser la respuesta popular. Construyeron su laberinto.

El Comité Ciudadano del Sistema Estatal Anticorrupción debe tomar posición al respecto. Las declaraciones “3 de 3”, no admiten excepciones. Son un instrumento trascendental para garantizar la integridad de los candidatos. La ciudadanía guanajuatense debe ser resguardada de tanta pillería, maquinada desde el poder. ¡Basta! Publiciten sus declaraciones.
